Cuando pensamos en postres que nos derriten el corazón, España tiene un repertorio que no se queda atrás. La gastronomía española es una fiesta para el paladar, y en cuanto a repostería, no se queda corta. Desde la textura cremosa de una tarta de queso hasta la suavidad de una crema catalana, los postres de España son el epítome de lo dulce y lo casero. Y lo mejor de todo, es que muchos de estos manjares son fáciles de preparar en casa.
A continuación, te comparto cinco recetas clásicas de postres españoles que puedes hacer con ingredientes sencillos y sin complicarte la vida. Así que, si alguna vez has querido traer un pedacito de España a tu cocina, ¡este es el momento!
5 postres de España que deleitan el paladar
1. Tarta de Queso: El clásico que nunca falla
Vamos a empezar con el rey de los postres de España: la tarta de queso. Este postre, que se ha vuelto icónico en gran parte de Europa, no solo es delicioso, sino que tiene ese toque casero que te hace sentir como en casa con cada bocado. La tarta de queso española se caracteriza por su textura suave, cremosa y ligeramente dorada en la parte superior. Y lo mejor es que no necesitas ser un chef para prepararla.
8 comensales:
Tiempo de preparación: 45 min.
Ingredientes:
- 2 paquetes de queso crema.
- 200 gr de azúcar.
- 2 huevos.
- 250 gr de mantequilla.
- 1 paquete de galletas vainilla.
- Limón o ralladura de naranja (opcional).
- Extracto de vainilla (opcional).
Preparación:
- Precalienta el horno a 180°C.
- Mezcla las galletas trituradas con mantequilla derretida y presiona en la base de un molde.
- En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta que quede suave.
- Añade los huevos uno a uno, asegurándote de mezclar bien después de cada adición.
- Incorpora la vainilla, mezclando todo hasta obtener una masa homogénea.
- Vierte la mezcla sobre la base de galletas y hornea durante 40-45 minutos, hasta que la parte superior esté dorada.
- Deja enfriar antes de desmoldar y ¡listo!
Este postre es perfecto para cualquier ocasión, desde una reunión familiar hasta un cumpleaños. Y si no quieres complicarte con la receta, puedes siempre optar por hacer un pedido en Tarta de Queso, donde encontrarás las mejores tartas de queso con un sabor único y especial.
2. Churros con Chocolate: El desayuno y postre estrella
Si hay algo que te va a hacer sentir en una plaza española, es sin duda un buen plato de churros con chocolate. Este postre es el equivalente español a una tarde de indulgencia. Los churros son una delicia crujiente por fuera y suave por dentro, y cuando los acompañas con una taza de chocolate espeso, ¡se vuelve irresistible!
Ingredientes para los churros:
- 250 ml de agua.
- 125 g de harina de trigo.
- 1 cucharada de aceite de oliva.
- 1 pizca de sal.
- Aceite para freír.
- Azúcar para espolvorear.
Ingredientes para el chocolate:
- 200 g de chocolate negro.
- 500 ml de leche.
- 1 cucharada de maicena (opcional, para espesar).
Preparación:
- Para los churros, calienta el agua con una pizca de sal y aceite de oliva. Cuando hierva, añade la harina y remueve rápidamente hasta formar una masa.
- Coloca la masa en una manga pastelera con boquilla estrellada y fríe los churros en aceite caliente hasta que estén dorados.
- Para el chocolate, calienta la leche y añade el chocolate troceado. Remueve hasta que se derrita completamente. Si te gusta el chocolate espeso, disuelve una cucharada de maicena en un poco de leche fría y agrégala a la mezcla.
- Sirve los churros espolvoreados con azúcar y acompáñalos con el chocolate caliente.
- Este postre es perfecto para una merienda o para consentirte un domingo por la mañana. Y te aseguro que después de probar estos churros caseros, ¡no querrás comprar los de la tienda!
3. Crema Catalana: La prima española del crème brûlée
La crema catalana es uno de esos postres que sorprende por su sencillez, pero al mismo tiempo, su sabor es pura sofisticación. Imagina una crema suave, aromatizada con canela y limón, cubierta por una capa crujiente de azúcar caramelizado. Es la versión española del famoso crème brûlée, pero con su propio toque mediterráneo.
Ingredientes:
- 500 ml de leche.
- 4 yemas de huevo.
- 100 g de azúcar.
- 1 rama de canela.
- La cáscara de un limón.
- 1 cucharada de maicena.
- Azúcar extra para caramelizar.
Preparación:
- Calienta la leche con la cáscara de limón y la rama de canela. Mientras tanto, en un bol, mezcla las yemas con el azúcar y la maicena.
- Retira la leche del fuego y cuélala para quitar la cáscara de limón y la canela. Poco a poco, añade la leche a la mezcla de yemas, removiendo constantemente.
- Vuelve a poner todo en la olla y cocina a fuego bajo hasta que espese. No dejes que hierva.
- Vierte la crema en pequeños recipientes individuales y deja enfriar en el refrigerador.
- Justo antes de servir, espolvorea azúcar sobre la superficie y caramelízala con un soplete o bajo el grill del horno.
Este postre es ideal para una cena elegante o para impresionar a tus amigos con un toque dulce al final de la comida.
4. Tarta de Santiago: Tradición en cada bocado
La tarta de Santiago es un postre gallego a base de almendras, muy tradicional en toda España. Lo que hace especial a esta tarta es su simplicidad: con pocos ingredientes se logra un sabor delicioso y una textura que esponja en la boca. Además, tiene un toque de limón y canela que le da un aroma irresistible.
Ingredientes:
- 250 g de almendra molida.
- 250 g de azúcar.
- 4 huevos.
- La ralladura de un limón.
- 1 cucharadita de canela.
- Azúcar glas para decorar.
Preparación:
- Precalienta el horno a 180°C. En un bol, mezcla las almendras molidas con el azúcar, la ralladura de limón y la canela.
- Añade los huevos y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Vierte la masa en un molde engrasado y hornea durante 30-35 minutos, hasta que esté dorada.
- Deja enfriar y decora con azúcar glas. Tradicionalmente, se usa una plantilla de la Cruz de Santiago para espolvorear el azúcar, pero si no tienes, simplemente cubre la tarta con una capa generosa.
Este postre es un excelente acompañamiento para un buen café o una infusión de té.
5. Torrijas: Un dulce pecado en Semana Santa
Las torrijas son el postre por excelencia durante la Semana Santa en España, pero la verdad es que son tan deliciosas que se disfrutan todo el año. Este postre consiste en rebanadas de pan remojadas en leche, pasadas por huevo y luego fritas, lo que da como resultado una textura crujiente por fuera y suave por dentro.
Ingredientes:
- 1 barra de pan (mejor si es del día anterior).
- 500 ml de leche.
- 100 g de azúcar.
- 1 rama de canela.
- La cáscara de un limón.
- 2 huevos.
- Aceite para freír
- Azúcar y canela para espolvorear.
Preparación:
- Calienta la leche con el azúcar, la rama de canela y la cáscara de limón. Retira del fuego y deja que se enfríe un poco.
- Corta el pan en rebanadas gruesas y sumérgelas en la leche hasta que estén bien empapadas.
- Pasa cada rebanada por huevo batido y fríelas en aceite caliente hasta que estén doradas por ambos lados.
- Escúrrelas en papel absorbente y espolvorea con azúcar y canela.
Las torrijas son tan deliciosas que nadie podrá resistirse a probar una… o dos, o tres.
¡Disfruta del verdadero sabor de la tarta de queso en Ciudad de México!
Si después de estas recetas te quedaste con antojo de una tarta de queso casera, no te preocupes, en Tarta de Queso tenemos la mejor opción para ti. Contáctanos en nuestra web y redes sociales para pedir la tarta de queso más deliciosa, cremosa y con ese toque especial que hará que todos se queden con ganas de más. Además, si eres amante del chocolate, no puedes dejar de probar nuestra versión de tarta de queso con chocolate, un verdadero manjar que combina lo mejor de ambos mundos.
Así que ya lo sabes, no importa la ocasión, en Tarta de Queso encontrarás el postre perfecto para consentirte o compartir con tus seres queridos. ¡Haz tu pedido ahora y deja que el encanto de la repostería española endulce tus días!
Soy Valeria Scavia, fundadora de la empresa Tarta de Queso. La repostería siempre ha sido una pasión para mi y la hora del postre el momento más esperado también. Pude dar inicio a este sueño, que empezó como un pequeño emprendimiento y que con suerte, se va convirtiendo en algo más. Emprender es como una montaña y rusa, con subibajas, no es fácil, pero vale 100% la pena. Vamos por más!
